El distrito de Salamanca toma su nombre de su promotor y constructor, José de Salamanca y Mayol, Marqués de Salamanca, en la primera fase del Ensanche de Madrid en el siglo XIX. Es singularidad del distrito su trazado reticular, con calles interconectadas y entrecruzadas que le confieren una característica propia. También sus edificios hacen de la zona, con gran nivel socio-económico, una de las más elegantes y con mayor prestigio de Europa, donde el comercio de lujo se ha establecido principalmente en los barrios de Goya, Lista y Castellana. Las viviendas del arquitecto Lecumberri, en su mayoría en torno al espacio comprendido entre las calles de Goya, Claudio Coello y Villanueva, son típicas del distrito. Estas tienen grandes portales con portones de madera para el acceso de carruajes, patios interiores y no sobrepasan las cuatro plantas de altura. Los palacios que aún se mantienen en el eje de La Castellana junto con modernas edificaciones, confieren a la zona un sello específico.
Cuando hablamos del distrito de Salamanca lo asociamos con los barrios de Goya, Recoletos, Lista y Castellana que son los que proyectaron para el Ensanche por el Marqués de Salamanca, pero, administrativamente, también forman parte del mismo los de la Guindalera y Fuente del Berro que se desarrollaron fuera de las rondas.
Un dato curioso es que en el mismo distrito ha habido tres plazas de toros. La primera estaba frente al Retiro en la actual Plaza de la Independencia. Se mantuvo durante ciento veinticinco años, hasta que en 1874 se derribó y en su lugar se construyó la de la Fuente del Berro en la carretera de Aragón que se derribó en mil novecientos treinta y cuatro. La tercera y actual plaza de toros es la Plaza de Las Ventas junto al puente del mismo nombre.
En el solar de la plaza de La Fuente del Berro, se construyó el Palacio de los Deportes, destruido por un incendio en dos mil uno y reconstruido posteriormente.
